miércoles, diciembre 03, 2008
Yo no fumo pipa (y si lo hiciera no lo podría hacer aquí en mi oficina, lo que, de ser un columnista de alguno de los aburridos diarios ingleses, achacaría despectivamente a los instintos regulatorios del new labour). Entonces a diferencia de Jenaro Prieto1 no sé en qué forma estoy gastándome para perpetrar lo que describo a continuación.
Ocurre que para modelar el flujo de polímeros en solución uno puede ocupar ecuaciones constitutivas macroscópicas, que son sencillas si se les compara a lo que estaría haciendo yo (en términos brevísimos, calcularía cuán estiradas están y para dónde apuntan las moléculas de polímero en forma agregada para obtener su efecto en el flujo). En la introducción de mi propuesta de tesis tengo que explicar por qué haré lo difícil en vez de lo fácil por lo que me embarco en una campaña de desprestigio de un párrafo contra las ecuaciones constitutivas macroscópicas. Quiero acusar entonces que muchas de las ecuaciones constitutivas macroscópicas tienen un origen empírico y están hechas para que uno ajuste unos cuantos parámetros en vez de salir de algún análisis más fundamental. Sin embargo sé que estas ecuaciones tienen que obedecer restricciones que tienen que ver con varios tipos de invariancia ante cambios de marco de referencia y todo eso, y hay toda una fauna de derivadas raras para que los esfuerzos internos del fluido sean tensores-tensores en vez de potencialmente antifísicos meros cuadrados con números. Miro capítulos enteros de libros justificando los preciosos parámetros para ajustar con datos experimentales y veo que hay una teoría elegante detrás. Pero ando con el cuchillo en la mano y vastos territorios del conocimiento2 son reducidos a las palabras 'with little more' en '[...] these constitutive laws were devised with little more than data-fitting in mind'.
1. Jenaro Prieto se gastaba fumando pipa para escribir sus artículos como lo confiesa ensu crónica "Humo de Pipa".
2. Compárese con el "continente del conocimiento" cuyo descubrimiento Althusser atribuía a Marx.
Ocurre que para modelar el flujo de polímeros en solución uno puede ocupar ecuaciones constitutivas macroscópicas, que son sencillas si se les compara a lo que estaría haciendo yo (en términos brevísimos, calcularía cuán estiradas están y para dónde apuntan las moléculas de polímero en forma agregada para obtener su efecto en el flujo). En la introducción de mi propuesta de tesis tengo que explicar por qué haré lo difícil en vez de lo fácil por lo que me embarco en una campaña de desprestigio de un párrafo contra las ecuaciones constitutivas macroscópicas. Quiero acusar entonces que muchas de las ecuaciones constitutivas macroscópicas tienen un origen empírico y están hechas para que uno ajuste unos cuantos parámetros en vez de salir de algún análisis más fundamental. Sin embargo sé que estas ecuaciones tienen que obedecer restricciones que tienen que ver con varios tipos de invariancia ante cambios de marco de referencia y todo eso, y hay toda una fauna de derivadas raras para que los esfuerzos internos del fluido sean tensores-tensores en vez de potencialmente antifísicos meros cuadrados con números. Miro capítulos enteros de libros justificando los preciosos parámetros para ajustar con datos experimentales y veo que hay una teoría elegante detrás. Pero ando con el cuchillo en la mano y vastos territorios del conocimiento2 son reducidos a las palabras 'with little more' en '[...] these constitutive laws were devised with little more than data-fitting in mind'.
1. Jenaro Prieto se gastaba fumando pipa para escribir sus artículos como lo confiesa en
